Consejos Ecológicos #3 – Repensar la Lavandería Escolar para Reducir la Contaminación por Micro Plásticos
Consejos Ecológicos es una columna mensual con sugerencias de Jason Giovannettone, Director de Clima y Sostenibilidad de las Hermanas de la Misericordia de las Américas. Esta serie ofrecerá consejos prácticos para ayudar a nuestras escuelas a adoptar prácticas más ecológicas, en consonancia con nuestro compromiso con el Asunto Crítico de la Misericordia por la Tierra.
Las escuelas desempeñan un papel importante en el cuidado del medio ambiente, e incluso las tareas cotidianas, como lavar la ropa, pueden tener un impacto. Desde el lavado de uniformes deportivos y batas de laboratorio hasta la limpieza de toallas y sábanas en guarderías de niños, los centros escolares manejan grandes volúmenes de ropa sucia. Esto supone una oportunidad: si se eligen cuidadosamente los materiales y los sistemas de filtración, los centros escolares pueden reducir la liberación de micro plásticos al medio ambiente. Comprender la relación entre la colada y los micro plásticos es un paso importante para fomentar la sostenibilidad y proteger nuestro planeta para las generaciones futuras.
¿Qué tiene que ver la ropa con el plástico? Gran parte de nuestra ropa está hecha de poliéster, que es una fibra sintética derivada del petróleo. El poliéster es duradero, barato, versátil, ligero y resistente a las manchas, la decoloración y las arrugas, pero tiene consecuencias negativas para el medio ambiente. Una de ellas, asociada a todos los productos derivados del petróleo, es el aumento de las emisiones de dióxido de carbono, causadas por la extracción del petróleo (un combustible fósil no renovable) necesario para fabricar productos de plástico y poliéster. En comparación con una fibra natural como el algodón, la energía necesaria para producir poliéster y las emisiones de carbono resultantes son casi un 240% superiores (fuente en ingles – y otra en español).
Otra fuente importante de daños al medio ambiente se produce durante el lavado y el uso de productos de poliéster. Por ejemplo, cada vez que una escuela o un hogar utiliza la lavadora para lavar ropa fabricada con poliéster, se ha descubierto que se liberan en el agua numerosos trozos pequeños de plástico, o micro plásticos (entre 640.000 y 1.500.000 microfibras por kilogramo de tejido – fuente). Estos plásticos acaban llegando al agua y al aire. Lavar la ropa es, de hecho, la segunda fuente más importante de micro plásticos para nuestros océanos, lagos y ríos, e incluso para nuestra agua potable.
Soluciones que se pueden considerar:
- Buscar ropa de poliéster fabricada a partir de botellas de agua recicladas y otros productos de plástico. Aunque esto puede prolongar la vida útil de una botella de plástico reciclable, el poliéster reciclado sigue liberando microfibras en el agua cuando se lava.
- Considerar la posibilidad de comprar artículos fabricados con materiales orgánicos naturales (por ejemplo, algodón, cáñamo, lana) siempre que sea posible, aunque esto podría plantear problemas presupuestarios, especialmente cuando se compran artículos al por mayor para un club escolar o un equipo deportivo.
- Instalar un filtro de microfibras para reducir el número de microfibras que entran en el agua de nuestras lavadoras. Un filtro de microfibras suele conectarse a la manguera de salida de agua de la lavadora para eliminar la mayor cantidad posible de material antes de verter el agua a la tubería de desagüe.
Entre los problemas que plantean estos filtros cabe citar que pueden ser caros y difíciles de instalar y mantener. Otra preocupación es cómo deshacerse de las microfibras y otros materiales atrapados por el filtro. Una empresa, PlanetCare, ayuda a resolver estos problemas. Su filtro captura hasta el 98% de los micro plásticos procedentes de la lavadora y es fácil de instalar. Los filtros se envían a granel para minimizar los envíos y la huella de carbono global. Cada filtro puede utilizarse para una media de 90 cargas de lavado. Como parte de un sistema de circuito cerrado, los clientes devuelven los filtros usados sin coste alguno; PlanetCare reciclará el material de microfibra y reacondicionará los filtros para su uso futuro. PlanetCare es la primera solución de filtrado que ha recibido la etiqueta de calidad OceanCleanWash, que reconoce su compromiso para detener la contaminación por microfibras de la ropa sintética.
Consejo útil
Consideren las ventajas de instalar un filtro en las lavadoras de su centro escolar para reducir la contaminación por micro plásticos. Investiguen los costes y el impacto potencial, y compartan lo que aprenden con su comunidad escolar. Cada acción -grande o pequeña, como escuela o como individuos- contribuye a un planeta más sano para las generaciones futuras.